Las autoridades de Kazajistán informan de 28 supervivientes. La aeronave siniestrada es un Embraer 190. Cubría la ruta entre Bakú, la capital de Azerbaiyán, y Grozni, en el sur de Rusia.
Un accidente aéreo sacudió el oeste de Kazajistán ayer, cuando un avión de la compañía Azerbaijan Airlines, con 72 personas a bordo, se estrelló cerca de la ciudad de Aktau, a orillas del mar Caspio. Según los reportes preliminares, el siniestro dejó un saldo de 39 fallecidos y al menos 28 sobrevivientes, varios de los cuales fueron trasladados a hospitales cercanos en estado crítico
La aeronave, un Embraer 190, realizaba un vuelo entre Bakú, la capital de Azerbaiyán, y Grozni, en Chechenia, cuando la tripulación reportó un fallo en el sistema de control. A las 08:35 (hora local), emitieron una señal de socorro y solicitaron un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Aktau. Sin embargo, a las 09:28, el avión impactó contra el suelo antes de llegar a la pista.
Mientras que la compañía Azerbaijan Airlines informó que a bordo iban 72 personas (67 pasajeros y 5 tripulantes), la agencia oficial kazaja Kazinfor indicó que el total ascendía a 105 pasajeros y 5 tripulantes. Las autoridades aún trabajan para confirmar la cifra exacta de personas involucradas en la tragedia.
Entre los pasajeros se encontraban 37 ciudadanos azerbaiyanos, seis kazajos, tres kirguises y 16 rusos, según el Ministerio kazajo de Transportes.
El Ministerio de Situaciones de Emergencia de Kazajistán reportó inicialmente 25 sobrevivientes, pero más tarde el Ministerio de Salud local actualizó la cifra a 28. La ministra de Salud, Akmaral Alnazarova, aseguró que equipos médicos especializados, incluidos traumatólogos y neurocirujanos, fueron enviados al lugar para atender a las víctimas y trasladar a los heridos más graves.
En el lugar del siniestro, se desató un incendio que fue controlado por los bomberos. Las causas exactas del accidente aún son desconocidas, aunque la falla técnica reportada por la tripulación podría ser un factor determinante.
El Gabinete de Crisis que gestiona la tragedia continúa trabajando en la recolección de pruebas para esclarecer las circunstancias del accidente, que deja en luto a varias naciones y pone en el centro de atención la seguridad aérea en la región.