El secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, alertó sobre “un giro peligroso” en la región. El ministerio de Asuntos Exteriores iraní reclamó “adoptar medidas urgentes y decisivas en respuesta a esta terrible violación del derecho internacional”.
La tensión en Medio Oriente escaló a niveles críticos tras el ataque de Estados Unidos a instalaciones nucleares en Irán. Como consecuencia, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas convocó a una reunión de emergencia a pedido del gobierno iraní, que denunció una violación grave del derecho internacional.
En un comunicado oficial, el Ministerio de Asuntos Exteriores iraní instó tanto a la ONU como al Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) a tomar “medidas urgentes y decisivas” frente al ataque.
“El silencio ante una agresión tan flagrante hundiría al mundo en un nivel de peligro y caos sin precedentes”, advirtieron desde Teherán.
La ONU alertó sobre “un giro peligroso” en Medio Oriente
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, encabezó la sesión del Consejo con un fuerte llamado a evitar una nueva espiral de violencia en la región. “He condenado repetidamente cualquier escalada militar en Oriente Medio. La gente de la región no puede soportar otro ciclo de destrucción”, expresó.
Guterres advirtió que el conflicto puede derivar en un “círculo de represalia tras represalia”, con consecuencias impredecibles para la estabilidad regional y global. “Se trata de un giro peligroso que debemos frenar con urgencia”, subrayó.
El argentino Rafael Grossi pidió “máxima moderación”
El director del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), el argentino Rafael Grossi, también expresó su preocupación por el riesgo de “expansión del conflicto”, y pidió “la máxima moderación”.
“Tenemos una ventana de oportunidad para volver al diálogo y a la diplomacia. Si esa ventana se cierra, la violencia y la destrucción podrían alcanzar niveles impensables y el régimen de no proliferación nuclear tal como lo conocemos podría desmoronarse y colapsar”, expresó durante una intervención por videoconferencia ante el Consejo.
En cuanto al impacto de los ataques estadounidenses, señaló que “son visibles cráteres en el sitio de Fordo, principal lugar de enriquecimiento de uranio al 60% en Irán, lo que indica el uso por parte de Estados Unidos de municiones perforantes”.
Pero “en este momento, nadie, incluido el OIEA, está en posición de evaluar los daños subterráneos” en ese sitio, señaló. “Los ataques armados contra instalaciones nucleares nunca deberían tener lugar”, insistió, y reiteró su preocupación por los riesgos de emisiones radiactivas.
La reunión ayer es la tercera de carácter urgente convocada por la ONU desde el inicio de la reciente escalada entre Israel e Irán. Sin señales de distensión en el corto plazo, la comunidad internacional mantiene la atención puesta en posibles nuevas represalias y sus consecuencias humanitarias y geopolíticas.