Independiente Rivadavia y Argentinos Juniors empataron 2-2 en el tiempo reglamentario y, tras la serie de penales, la Lepra se consagró campeón de la Copa Argentina y jugará la Copa Libertadores por primera vez en su historia.
Independiente Rivadavia de Mendoza escribió una página inolvidable en el fútbol argentino al consagrarse campeón de la Copa Argentina por primera vez en su historia y, de esa forma, logró la clasificación a la Copa Libertadores 2026. En una final cargada de emoción disputada en Córdoba, el equipo dirigido por Alfredo Berti igualó 2-2 ante Argentinos Juniors y se impuso 5-3 en la tanda de penales.

La Lepra se puso en ventaja rápidamente gracias a Alex Arce, y pese a la expulsión de Maximiliano Amarfil antes del descanso, logró ampliar la diferencia en el inicio del segundo tiempo con un tanto de Matías Fernández.
El Bicho reaccionó con el tanto de Alan Lescano y, en tiempo de descuento, Erik Godoy marcó el empate que llevó la definición a los penales.

En la tanda decisiva, Gonzalo Marinelli, quien reemplazó al lesionado Ezequiel Centurión, se lució bajo los tres palos. Sebastián Villa convirtió el penal definitivo y selló la consagración mendocina.
Pese a terminar con nueve jugadores por las expulsiones de Alejo Osella y Amarfil, además de la del propio Berti, Independiente Rivadavia resistió el empuje de Argentinos Juniors y celebró el primer título nacional de su historia.
La fiesta fue total en Córdoba: la Lepra mendocina, que hace pocos años militaba en la Primera Nacional, levantó un trofeo histórico y lo hizo con épica.


