La decisión del Gobierno, y su correspondiente decreto, se da en medio del fuerte conflicto que mantienen con los gremios aeronáuticos por los beneficios que mantienen los empleados.

En medio del conflicto entre el Gobierno y los gremios aeronáuticos, el Gobierno publicó hoy en el Boletín Oficial el decretó que firmó el presidente Javier Milei para declarar a Aerolíneas Argentinas SA “sujeta a privatización”.

La medida, que había sido adelantada la semana pasada por el vocero presidencial, Manuel Adorni, fue publicada mediante el decreto 873/2024, en el Boletín Oficial.

“La privatización de la compañía y su funcionamiento en condiciones de mercado permitirán una mejor prestación del servicio, el cuidado de las arcas públicas y, principalmente, que los argentinos dejen de financiar el déficit de una compañía ineficiente”, sostiene el documento, que también lleva las rúbricas del jefe de Gabinete Guillermo Francos y el ministro de Economía, Luis Caputo.

Además, sostiene: “El Gobierno se encuentra desarrollando un amplio programa de transformación del sistema nacional de transporte en general y aéreo en particular, tendiente a racionalizar la oferta de servicios, expandir las inversiones y disminuir los costos; ello con la perspectiva de contribuir al incremento de la competitividad de la economía y al mejoramiento de la calidad de los servicios”.

Dentro del documento, el presidente Javier Milei presentó datos proporcionados por la Oficina Nacional de Presupuesto del Ministerio de Economía. “En el año 2023, solamente siete de las empresas estatales obtuvieron ganancias y únicamente cuatro no requirieron el aporte de fondos del Tesoro”, señaló. A su vez, también pluralizó: “Con miras a la racionalización de los recursos y con la finalidad de solucionar la actual crisis económica que atraviesa el país, se torna necesaria la transferencia al sector privado de aquellos entes cuya actuación en el ámbito estatal ya no encuentra sustento”.

Además, el Gobierno consideró: “A pesar de las buenas intenciones que podrían haber sustentado, luego de 16 años de la estatización de la compañía, los objetivos propuestos no fueron concretados”.

También se argumentó que el Tesoro Nacional no está en condiciones de ocuparse de una empresa “altamente deficitaria” y adjudicó que quienes la mantiene son los argentinos a través de un aporte de más de cientos de millones de pesos.

En los considerandos, se indicó que la empresa cuenta con una dotación de 1107 pilotos de línea para 81 aeronaves activas, lo que representa una relación de aproximadamente 14 pilotos por cada avión operativo; “un número desproporcionado con relación a los estándares de la industria a nivel mundial”.

Una medida ya anunciada semanas atrás

La decisión la había anticipado una semana atrás el vocero presidencial durante una conferencia de prensa, en la cual advirtió que, con el aval de la Ley de Reforma del Estado, se designaría a la línea aérea sujeta a privatización y sostuvo: “Arrastra un déficit catastrófico, a raíz de las desastrosas gestiones”.

El vocero marcó que Aerolíneas arrastra un “déficit crónico” a raíz de las “desastrosas gestiones de los gobiernos populistas”, y alegó que esto hace que se tengan que transferir recursos públicos a la compañía que “ponen en riesgo” la sostenibilidad fiscal.

“Arrastra un déficit crónico, a raíz de las desastrosas gestiones que llevaron a cabo todos y cada uno de los gobiernos populistas, lo que provoca la necesidad de efectuar constantes transferencias de recursos públicos que ponen en riesgo la sostenibilidad fiscal”, explicó.

En tanto, el Gobierno citó ejemplos sobre cómo funcionan las líneas aéreas privadas en otros países: “El Estado canadiense cuenta con solo el 7% de participación accionaria en Air Canada, mientras que Qantas Airlines Limites (Australia), Air India Limited (India) y Deutsche Lufthansa (Alemania) no cuentan con actividad en su capital accionario”.

“En esa línea, el sobredimensionamiento de la estructura de Aerolíneas Argentinas surge con claridad de su comparación con compañías aéreas de la región; mientras que la empresa argentina cuenta con un promedio de 125 empleados por aeronave, Gol Linhas Aéreas Inteligentes (GOL) dispone de 97 y la Compañía Panameña de Aviación (Copa Airlines), de 70″, analizó en relación a sus pares de la región.