Los empleados y el empresario no consiguen acordar mejoras salariales. Advierten que puede haber medidas de fuerza. No obstante, el diálogo está abierto.
Casi dos meses duró el bienestar y la concordia entre los trabajadores y los propietarios de las empresas TIG y Minibus, pero en las últimas parecen haber vuelto los desentendimientos y desde la Unión Tranviarios Automotor (UTA) comunicaron que los choferes, mecánicos y administrativos se encuentran en “estado de alerta”.
El 11 de julio pasado se había alcanzado el último acuerdo en materia salarial entre los empleados y el empresario, algo que no duró mucho y hoy ya no logran llegar a un acuerdo, e incluso se anunciaron “medidas de acción directa”, o sea paro de actividades.
“Vale destacar que el cuerpo de delegados siempre está abierto al diálogo para encontrar una solución lo antes posible, para así no alterar la paz social e interrumpir el servicio”, dice textualmente un comunicado emitido esta mañana y que lleva la firma de los delegados de la UTA Roberto Tarón (TIG) y Jorge Yersul (Minibus).