Un estudio del Centro de Ecología Aplicada del Litoral (Conicet-UNNE) analizó la abundancia, diversidad de especies del fitoplancton en lagunas y ríos de los Esteros del Iberá, en condiciones contrastantes de sequía e inundación. Destacan que los resultados pueden constituirse en valores de referencia para futuros estudios ambientales.

El fitoplancton es el conjunto de microorganismos fotosintéticos adaptados a vivir parcial o continuamente en aguas abiertas. Está constituido por diversos grupos de microalgas y cianobacterias con características morfológicas y fisiológicas propias, y es de suma relevancia para los ambientes acuáticos al ser la base de la cadena trófica.

Además, estos microorganismos son indicadores de la calidad del agua por responder rápidamente a los cambios naturales y antrópicos que ocurren en estos ambientes.

En el caso del gran humedal Iberá de la provincia de Corrientes, es un sistema que no tiene conexión con el río Paraná y está alimentado exclusivamente por lluvias locales, por lo que las diferencias entre períodos secos y lluviosos son el principal vector de los cambios biológicos.

Pero la respuesta del fitoplancton a estos cambios pluviométricos era desconocida y, en este sentido, un proyecto del Centro de Ecología Aplicada del Litoral “CECOAL” (Conicet-UNNE), analizó la abundancia, diversidad, riqueza de especies y equitatividad del fitoplancton en los Esteros del Iberá, en condiciones de sequía e inundación, tanto para ambientes lénticos (lagunas) y lóticos (ríos y arroyos).

“Los análisis mostraron que la abundancia del fitoplancton en la mayoría de los ambientes del sistema Iberá no es afectada por la variabilidad climática, sin embargo, si se ve modificada la diversidad, riqueza de especies y equitatividad del fitoplancton”, se destaca en las conclusiones del estudio que fueron publicadas en el último volumen de la Revista Bomplandia de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE).

Se agrega que en las grandes lagunas predominan las cianobacterias como componentes del fitoplancton, con los valores más altos de densidad en la laguna Iberá durante el período seco, con especies potenciales productoras de cianotoxinas.

El estudio del CECOAL estuvo a cargo de la Dra. Marina Forastier, del Laboratorio de Ficología; la Dra. María Celeste Franceschini, del Laboratorio de Herbivoría y Control Biológico en Humedales; y el Dr. Félix Ignacio Contreras, del Grupo Geografía Física (CECOAL) y de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura de la UNNE.

 

Detalles del Estudio

Para el estudio se incluyeron como ambientes lénticos a las lagunas Galarza, Luna e Iberá, y como ambientes lóticos al arroyo Carambola y al río Corriente.

Según lo observado, el fitoplancton de los Esteros del Iberá con excepción de la laguna Iberá, presenta similar abundancia y diferencias en la riqueza, diversidad y equitatividad de especies en periodos climáticos contrastantes.

La laguna Iberá registró la mayor abundancia del fitoplancton con predominio de cianobacterias del sistema Iberá, y esto estaría en relación con la eutrofia que exhibe debido a que tiene cierto efecto antrópico, comparado con el resto de las lagunas del sistema.

En este sitio la abundancia de cianobacterias fue mayor en el período seco.

En cuanto a la presencia de cianobacterias, se menciona como relevante la presencia de las especies de Raphidiopsis raciborskii y Microcystis aeruginosa porque tienen la capacidad de ser invasoras, potenciales productoras de cianotoxinas y de formar floraciones que disminuyen la calidad del agua.

Relevancia

En diálogo con UNNE Medios, la Dra. Marina Forastier destacó que la variación del fitoplancton puede considerarse como bioindicador de posibles cambios ambientales o de la calidad del agua, y de allí la importancia del estudio de haber generado datos de dos períodos contrastantes.

En particular mencionó que las cianobacterias representan uno de los grupos más relevantes del fitoplancton en el sistema Iberá, y se constató la presencia de algunas especies potencialmente tóxicas, en especial en la laguna Iberá, uno de los sitios más vulnerable a los eventos climáticos dentro de este ecosistema.

Señaló que la información generada debería ser tenida en cuenta en acciones de monitoreo y alertas tempranas por parte de los organismos competentes.

Comentó que de manera previa existían estudios, escasos, que analizaron la abundancia, riqueza y diversidad del fitoplancton del Iberá, pero se desconocía cómo varían estos indicadores durante períodos contrastantes de sequía e inundación.

 

Perspectivas

“Nuestros resultados de abundancia, riqueza y diversidad del fitoplancton, considerando períodos húmedo y seco, podrán constituirse como valores de referencia para futuras comparaciones y estudios de línea de base ambiental con sitios de mayor impacto”, destacan desde el equipo del CECOAL.

Al respecto, señalan que los humedales del Iberá representan un escenario ideal para llevar a cabo estudios que comparen la comunidad del fitoplancton en sequía e inundación debido a que el efecto antrópico es escaso, el sistema es altamente dinámico, presenta una alta heterogeneidad de hábitats y se encuentra aislado de la influencia de grandes ríos como el Paraná y Uruguay.

Dada la estrecha relación que tiene la laguna Iberá con la localidad de Colonia Carlos Pellegrini, como principal centro de ecoturismo y actividades recreativas, los autores consideran a esta laguna el sitio de Iberá más vulnerable a los eventos climáticos extremos, se recomienda realizar monitoreo de cianobacterias para el seguimiento y alerta tempranas de posibles floraciones.